miércoles, 6 de marzo de 2013

A grandes rasgos... mi vida II

Entré en la universidad, y a los pocos días conocí a un chico. Empezamos a hablar por internet, la cosa parecía que iba bien así que decidimos quedar. Quedamos una tarde de octubre, tomamos café, dimos un paseo... y se fue. Continuamos hablando, yo, cada vez que lo veía el corazón me iba a estallar, pero parecía que la situación estaba parada, así que decidí que quedáramos otra vez. Comimos juntos, y después me dijo que yo le gustaba... Empezamos a salir juntos. Parecía que mi vida iba mejorando, la primera vez que me enamoraba y era correspondido... El tiempo pasaba, yo era inmensamente feliz con él, con pensamientos de futuro, romance... pero claro, nada puede ir tan perfecto y mucho menos en mi vida, así que, una persona, sin vida propia, amargada, decidió hacernos la vida imposible... Claro está, esa persona influía bastante en mi pareja, ya que era bastante importante para él. La cosa iba a peor... como de costumbre, ya no era como antes, se dejaba llevar por lo que la otra persona quería y no por lo que sentía así que un día pasó de decirme te quiero a quiero cortar, pero te quiero. Yo estaba en un mar de dudas, él no sabía ni lo que quería, bueno sí, sí sabía lo que sentía y sí sabía lo que quería pero era un cobarde. En vez de luchar por lo que se quiere o se ama, eligió el camino fácil. La relación se acaba y yo destrozada, en ese momento sentía que mi corazón se había partido en mil pedazos, no tenía consuelo de nadie, me faltaba el aire y solo quería llorar, dormir, llorar, dormir... Poco a poco, empecé a ponerme mejor, tenía a personas en las que apoyarme, que no me daban de lado, que me hacían ver las cosas de otra maneras, así que con mucho esfuerzo lo superé. Me costó bastante tiempo, el desengaño, la desilusión el desamor... pesaban en mi vida, debería de estar acostumbrada a eso, pero no lo estaba... Pasa el tiempo, pasa el verano...  A veces lloraba porque los recuerdos inundaban mi mente, recuerdos preciosos, felices, pero a la vez amargos... Aún así, hacía todo lo posible para que me afectara lo mínimo en mi vida diaria... Cuando estuve un poco mejor, conocí a nuevas personas... amigas, compañeras de clase, salía, me divertía... y así pasó el verano y de nuevo comenzó el nuevo curso... de nuevo la universidad....

No hay comentarios:

Publicar un comentario